Wâûsidama
Mama Alma Murelia es una de las integrantes del programa psicosocial de Papsivi. Su participación en dicho programa es respaldado por la ley 1448 (Ley de victimas y restitución de Tierras). Murelia explica que a pesar de que es un programa no financiado y con escasas garantías, lo que buscan es la reparación de las victimas del conflicto armado a partir de lo psicosocial. Murelia expresaba que en su experiencia trabajando directamente con las víctimas ha podido evidenciar que ha sido una guerra que ha afectado a toda clase de poblaciones, incluso a profesionales. La violencia la vive desde la familia mas pobre hasta el profesional titulado. Esto a ellos no les importa.
Mama Alma comentaba que uno de los más arduos desafíos ha sido la difícil tarea de preservar la identidad, esto por las condiciones sociales de su entorno, claramente para una persona llegar de una zona rural, adaptarse al ambiente hostil y citadino no es nada sencillo.
Debido a los diversos asentamientos de comunidades indígenas en la ciudad, Murelia comentaba que el verdadero desafío es intentar que las comunidades se sientan aceptadas, que sientan que esta es su casa, pues muchas situaciones los hace sentir que no lo es. Un ejemplo claro es el tema de su lengua, pocos espacios se brindan para el mantenimiento de ésta aquí en la ciudad. Como lo comenté anteriormente, se les niega la preservación de su cultura, y ese es el verdadero desafío para Mama Alma.
"La tierra también ha sido victima"
El tema de la tierra ha sido uno de los mas importantes ha tener en cuenta. Sin embargo, poco se toma desde el punto de vista que Mama Alma comentó. El Glifosato tuvo como consecuencia la esterilización de la tierra, desafortunadamente son terrenos que ya no pueden producir ni trabajarse.
"El conflicto sigue latente"
"No nos sentimos en casa"
"Gracias al glifosato la tierra es estéril, como quieren que retornemos a producir"
El reto mas grande ha sido intentar preservar nuestra cultura y tradición en una ciudad tan hostil
